¿Cuándo?
Hoy se cumple el primer aniversario de este blog. Tal día como hoy hace un año comencé la andadura de escribir lo que se me pasaba por la cabeza en ese momento, algunas anécdotas vividas con o sin NiñoNinja, lo que se me ponía en la peineta y sobre todo, una forma de tener por escrito cosas que han pasado en mi vida lo suficientemente relevantes, como para no olvidarme de ellas y que en algún momento NiñoNinja pueda leer y saber cosas que Mamá que no le contó.
¿Por qué?
Pues aquí es donde me pongo un poco melodramática (sólo un poco).
Ya conté aquí que hace años me diagnosticaron una enfermedad degenerativa, crónica e incurable del sistema neurológico (EM). Ahora estoy bien, bueno, tengo mis días, pero en general estoy bien. Pero lo que siempre me ha preocupado ha sido el hecho de perder actitudes y en algún momento, perder visión, movilidad o capacidad para hablar. Como soy tremendamente positiva en esto, sé que no me va a pasar pero como además de positiva soy prevenida y si llegase el caso (que no va a ser) quiero dejar por escrito todas esas cosas que han sido y son importantes en mi vida, aún siendo gilipuerteces absurdas.
Todo eso que ahora quizás no tenga mucho sentido contar, pero en algún momento espero ayude a NiñoNinja a saber lo mucho que le queremos como ya conté aquí, lo orgullosos que siempre hemos estado (estamos y estaremos) de él, de las cosas que decía y alguna que otra trastada que nos hará. Cómo llegó a este mundo. Quién está y estuvo en el corazón de Mamá cuidándola. Qué hacían Sensei y Servidora cuando NiñoNinja se iba de vacaciones y nos quedábamos solos en casa. Lo que a Servidora le gusta y lo que detesta. Lo mucho que disfrutabas y disfrutarás en PuebloNinja y lo que ocurría y ocurrirá en PlayaNinja. Las vivencias compartidas con los Amigos de Papá. Aquellas cosas nuevas que aprendías. Lo que para Mamá suponían las fiestas del cole. Las tonteces que le han ocurrido a Mamá. Tus primeros estudios y esfuerzos ya como personita casi pensante. Lo orgulloso que ibas a estar de ser el hermano mayor y lo que lloramos cuando sólo se quedó en un futuro proyecto y lo que pasa cuando Mamá se queda con tus adorados Ecobios.
Éstas y otras muchas que ya vendrán más adelante, quedarán por escrito, para que llegado el momento lo leas, te rías, llores o hagan con ello lo que consideres, pues éste es ni más ni menos que mi homenaje a la vida. La tuya y la mía.
Conclusión
Pienso seguir escribiendo, algunas veces desde la alegría, otras desde la tristeza y en la mayoría de los casos con el humor, ironía o malaleche que me caracterizan con algunos temas. Es duro, ¡¡¡qué diablos!!! es muy duro escribir. Al principio escribía casi a diario, luego me relajé y sólo colgaba una entrada nueva cada semana. Luego ya me relajé del todo y escribía cada dos semanas o más. No soy de escribir muchas cosas y guardarlas en la recamara. He de reconocer que mi escritura es según el día, pienso en algo que ha ocurrido y lo escribo en ese momento. No puedo escribir algo tristón en un día en el que estoy como las castañuelas, y viceversa , no me sale….. Así pues, el día que estoy eufórica de contenta ese día tiene todas las papeletas de acabar con una entrada absurda de alguna reunión de amigos, familia o algo que con sólo recordarlo, haga que me despiporre de la risa. Otros días más grises acabaré con una entrada casi siempre llamada desde la melancolía. Y los días en los que algo de nuestro entorno me toca la peineta, ese día tendremos una entrada en la que me acuerde de todos los muertos que almuerzan a caballo (como suele decir Sensei).
Pienso seguir poniendo títulos de películas a mis post. En la mayoría de los casos la entrada en sí no tiene NADA que ver ni con el título ni con la película. Sólo alguna pincela o alguna referencia del propio título, pero dado que digamos soy “algo” cinéfila, me pareció una buena idea, aunque en muchas ocasiones después de haber escrito la entrada, me resulta cuanto menos complicado, encontrar el título de una peli que pueda encajar.
Y por último …..
¡¡¡A por otro año(s) más!!!
No quiero despedir este primer año sin dar las gracias a todos aquellos que desde la Minoría Cultivada han dado sentido a este blog. A aquellos que llegaron para quedarse. A aquellos que pasaron para no regresar jamás. Y sobre todo, sobre todo... Gracias a los que están por llegar.
